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CONTRA
EL BUROCRATISMO
PUBLICACIÓN DEL MINISTERIO DE COMUNICACIÓN E INFORMACIÓN
DIRECTORIO
Andrés Izarra
Ministro de Comunicación e Información
Yuri Pimentel
Viceministro de Estrategia Comunicacional
William Castillo
Viceministro de Gestión Comunicacional
Coordinación General
Senira Salasar
Director de Arte
José Luis Díaz Jiménez
e-mail: publicidad@mci.gov.ve
Octubre de 2004
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Contra el burocratismo
ERNESTO“CHE”GUEVARA
A los 39 años de edad desapareció físicamente
Ernesto “Che” Guevara. Hoy sus ideas
revolucionarias no se olvidarán jamás,
pues como expresara el líder cubano
Fidel Castro:
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Ernesto “Che” Guevara
CONTRA EL BUROCRATISMO
N
uestra Revolución fue, en esencia, el pro- un modo racional, utilizando las técnicas de la plani-
ducto de un movimiento guerrillero que ficación conocidas en los hermanos países socialis-
inició la lucha armada contra la tiranía y tas.
la cristalizó en la toma del poder. Los primeros pasos Como contra medida, se empezaron a organizar
como Estado Revolucionario, así como toda la primi- los fuertes aparatos burocráticos que caracterizan
tiva época de nuestra gestión en el gobierno, esta- esta primera época de construcción de nuestro
ban fuertemente teñidos de los elementos funda- Estado socialista, pero el bandazo fue demasiado
mentales de la táctica guerrillera como forma de grande y toda una serie de organismos, entre los que
administración estatal. El “guerrillerismo” repetía la se incluye el Ministerio de Industrias, iniciaron una
experiencia de la lucha armada de las sierras y los política de centralización operativa, frenando exage-
campos de Cuba en las distintas organizaciones radamente la iniciativa de los administradores. Este
administrativas y de masas, y se traducía en que sola- concepto centralizador se explica por la escasez de
mente las grandes consignas revolucionarias eran cuadros medios y el espíritu anárquico anterior, lo
seguidas (y muchas veces interpretadas en distintas que obligaba a un celo enorme en las exigencias de
maneras) por los organismos de la administración y cumplimiento de las directivas. Paralelamente, la
de la sociedad en general. La forma de resolver los falta de aparatos de control adecuados hacía difícil la
problemas concretos estaba sujeta al libre arbitrio correcta localización a tiempo de las fallas adminis-
de cada uno de los dirigentes. trativas, lo que amparaba el uso de la “libreta”. De
Por ocupar todo el complejo aparato de la socie- esta manera, los cuadros más conscientes y los más
dad, los campos de acción de las “guerrillas adminis- tímidos frenaban sus impulsos para atemperarlos a
trativas” chocaban entre sí, produciéndose conti- la marcha del lento engranaje de la administración,
nuos roces, órdenes y contraórdenes, distintas inter- mientras otros campeaban todavía por sus respetos,
pretaciones de las leyes, que llegaban, en algunos sin sentirse obligados a acatar autoridad alguna, obli-
casos, a la réplica contra las mismas por parte de gando a nuevas medidas de control que paralizaran
organismos que establecían sus propios dictados en su actividad. Así comienza a padecer nuestra
forma de decretos, haciendo caso omiso del aparato Revolución el mal llamado burocratismo.
central de dirección. Después de un año de doloro- El burocratismo, evidentemente, no nace con la
sas experiencias llegamos a la conclusión de que era sociedad socialista ni es un componente obligado de
imprescindible modificar totalmente nuestro estilo ella. La burocracia estatal existía en la época de los
de trabajo y volver a organizar el aparato estatal de regímenes burgueses con su cortejo de prebendas y
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Contra el burocratismo
de lacayismo, ya que a la sombra del presupuesto La falta de organización tiene como característi-
medraba un gran número de aprovechados que ca fundamental la falla en los métodos para encarar
constituían la “corte” del político de turno. En una una situación dada. Ejemplos podemos ver en los
sociedad capitalista, donde todo el aparato del Ministerios, cuando se quiere resolver problemas a
Estado está puesto al servicio de la burguesía, su otros niveles que el adecuado o cuando éstos se tra-
importancia como órgano dirigente es muy pequeña tan por vías falsas y se pierden en el laberinto de los
y lo fundamental resulta hacerlo lo suficientemente papeles. El burocratismo es la cadena del tipo de
permeable como para permitir el tránsito de los funcionario que quiere resolver de cualquier mane-
aprovechados y lo suficientemente hermético como ra sus problemas, chocando una y otra vez contra el
para apresar en sus mallas al pueblo. orden establecido, sin dar con la solución. Es fre-
Dado el peso de los “pecados originales” yacen- cuente observar cómo la única salida encontrada
tes en los antiguos aparatos administrativos y las por un buen número de funcionarios es el solicitar
situaciones creadas con posterioridad al triunfo de más personal para realizar una tarea cuya fácil solu-
la Revolución, el mal del burocratismo comenzó a ción sólo exige un poco de lógica, creando nuevas
desarrollarse con fuerza. Si fuéramos a buscar sus raí- causas para el papeleo innecesario.
ces en el momento actual, agregaríamos a causas vie- No debemos nunca olvidar, para hacer una sana
jas nuevas motivaciones, encontrando tres razones autocrítica, que la dirección económica de la
fundamentales. Revolución es la responsable de la mayoría de los
Una de ellas es la falta de motor interno. Con esto males burocráticos: los aparatos estatales no se des-
queremos decir, la falta de interés del individuo por arrollaron mediante un plan único y con sus relacio-
rendir su servicio al Estado y por superar una situa- nes bien estudiadas, dejando amplio margen a la
ción dada. Se basa en una falta de conciencia revolu- especulación sobre los métodos administrativos. El
cionaria o, en todo caso, en el conformismo frente a aparato central de la economía, la Junta Central de
lo que anda mal. Planificación, no cumplió su tarea de conducción y
Se puede establecer una relación directa y obvia no la podía cumplir, pues no tenía la autoridad sufi-
entre la falta de motor interno y la falta de interés ciente sobre los organismos, estaba incapacitada
por resolver los problemas. En este caso, ya sea que para dar órdenes precisas en base a un sistema único
esta falla del motor ideológico se produzca por una y con el adecuado control y le faltaba imprescindi-
carencia absoluta de convicción o por cierta dosis ble auxilio de un plan perspectivo. La centralización
de desesperación frente a problemas repetidos que excesiva sin una organización perfecta frenó la
no se pueden resolver, el individuo, o grupo de indi- acción espontánea sin el sustituto de la orden
viduos, se refugian en el burocratismo, llenan pape- correcta y a tiempo. Un cúmulo de decisiones meno-
les, salvan su responsabilidad y establecen la defen- res limitó la visión de los grandes problemas y la
sa escrita para seguir vegetando o para defenderse solución de todos ellos se estancó, sin orden ni con-
de la irresponsabilidad de otros. cierto. Las decisiones de última hora, a la carrera y
Otra causa es la falta de organización. Al preten- sin análisis, fueron la característica de nuestro traba-
der destruir el “guerrillerismo” sin tener la suficiente jo.
experiencia administrativa, se producen disloques, La tercera causa, muy importante, es la falta de
cuellos de botellas, que frenan innecesariamente el conocimientos técnicos suficientemente desarrolla-
flujo de las informaciones de las bases y de las ins- dos como para poder tomar decisiones justas y en
trucciones u órdenes emanadas de los aparatos cen- poco tiempo. Al no poder hacerlo, deben reunirse
trales.A veces éstas, o aquellas, toman rumbos extra- muchas experiencias de pequeño valor y tratar de
viados y, otras, se traducen en indicaciones mal ver- extraer de allí una conclusión. Las discusiones sue-
tidas, disparatadas, que contribuyen más a la distor- len volverse interminables, sin que ninguno de los
sión. expositores tenga la autoridad suficiente como para
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