Como

en otros lugares los cierres de los huecos son originalmente macizos. Tableros de madera prac7cables eventualmente conplementados por unos marcos colocados a bofetn y rellenos de pequeos vidrios cuadrados.

Las viviendas pequeo burguesa se construye entremedianeras con crujas de 5 o 7 metros segn la luz estructural que permiten los arboles de la zona. Esa estrechez y la gran profundidad edicada conducen a una bsqueda desesperada de la luz exterior. Las fachadas se perforan hasta el lmite, reduciendo los muros de fachada a una especie de atrevido pr7co. En las cubiertas se asoman espectaculares lucernarios para conducir la luz a los puntos mas alejados de la fachada.

Si en el ensanche barcelons la proporcin de supercie de fachada ocupada por los huecos no excede el 40%, en las ventanas de Oporto este porcentaje suele ser superior al 60%. Para conseguirlo no solo se estrechan los macizos entre huecos hasta conver7rse en meros pilares sino que las ventanas crecen en altura para llevar la luz hasta el fondo de las habitaciones y sus alcobas. La funciones se estra7can hacindose opaca la parte inferior de muchos cerramientos mientras que en la parte superior se diferencia un elemento especico de iluminacin: El tragaluz.

El tragaluz es un elemento central de las fachadas. Sobre las hojas prac7cables del hueco se sita un gran marco vidriado que se convierte en un iden7cador de la arquitectura del momento.

Estos espectaculares tragaluces se convierten en los elementos de diseo mas sos7cado de la carpintera porque acogen funciones diversas como algunos elementos prac7cables o no para permi7r la ven7lacin de los siempre hmedos espacios interiores

En algunos casos esos tragaluces innovadores son pivotantes para facilitar la ven7lacin. El segundo caso mostrado a con7nuacin 7ene un enorme marco que pivota de forma que con7nua protegiendo frente a la lluvia.

No podemos dejar de apuntar aqu que la imaginacin construc7va de los carpinteros llevo a el uso de carpinteras acabadas en taller y colocadas a bofetn sobre la fachada simplemente colgadas de unos ganchos, como estas guillo7nas de Braga

Tambin es cierto que aunque raramente aparecen soluciones de proteccin frente al sol y el exceso de luz en algunos huecos excepcionales.