CRISTO; es culpa ma. Si no lo creo, estoy condenado. Mi deber es simplemente declarar que el Cordero de Dios ha cargado con los pecados del mundo. Se me ha ordenado que lo crea y lo confiese, y que persevere hasta la muerte.
Si alguien no participa ni disfruta de
tal gracia ni misericordia, no tiene a nadie a quien culpar que no sea a s mismo y a su rechazo de creer y aceptar estas verdades. Si te niegas a creer estas palabras, Vete al Diablo! Pues si ests en el mundo y tus pecados forman parte de los pecados del mundo, entonces este texto es para ti.