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Salmo 139

• El salmo 139 nos transporta de


golpe, como en el interior de un
teatro, al volumen pleno del
espacio, con sus dimensiones
cósmicas, especia de campo
cerrado y vacío en que no se
ofrece más que una alternativa:
huir de Dios en vano, puesto que
Dios sujeta al hombre, o dejarse
asir por Dios sin huir de el.
Detrás y delante me rodeaste,
Y sobre mí pusiste tu mano.
Tal conocimiento es demasiado
maravilloso para mí;
Versículos Alto es, no lo puedo comprender.
¿A dónde me iré de tu Espíritu?
5–8 ¿Y a dónde huiré de tu presencia?
Si subiere a los cielos, allí estás tú;
Y si en el Seol hiciere mi estrado, he
aquí, allí tú estás.
• El espacio
aparece vacío y
como algo
negativo.
• Está hecho de
distancias.
• No hay una
visión positiva
del espacio pero
tampoco una
visión que
inspire miedo.
El cosmos
Si tomare las alas del alba
Versículos Y habitare en el extremo del mar,
Aun allí me guiará tu mano,
9 – 10 Y me asirá tu diestra.
La presencia de Dios

• La imagen de Dios como un ojo.


• Una mano como representación
de Dios.
Porque tú formaste mis entrañas;
Tú me hiciste en el vientre de mi madre.
Te alabaré; porque formidables,
maravillosas son tus obras;
Estoy maravillado,
Y mi alma lo sabe muy bien.
Versículos No fue encubierto de ti mi cuerpo,
Bien que en oculto fui formado,
13 – 16 Y entretejido en lo más profundo de la
tierra.
Mi embrión vieron tus ojos,
Y en tu libro estaban escritas todas aquellas
cosas
Que fueron luego formadas,
Sin faltar una de ellas.
“Punto de creación”

• En el salmo se construye en
una bella oposición entre lo
extenso, espacio diseminado
que es lo exterior al encuentro
o el lugar de la acción negativa
de Dios, y la bola cálida del
embrión en la noche del seno
materno, en que Dios actual
positivamente.
Si dijere: Ciertamente las tinieblas
me encubrirán;
Aun la noche resplandecerá
Versículos alrededor de mí.
Aun las tinieblas no encubren de ti,
11 – 12 Y la noche resplandece como el día;
Lo mismo te son las tinieblas que la
luz.
La vista de Dios

• Es capaz de rasgar toda


oscuridad.
• Dios es invisible para el ojo
humano.
• Dios ve lo que el hombre
no pude ver.
No fue encubierto de ti mi cuerpo,
Versículo Bien que en oculto fui formado,
15 Y entretejido en lo más profundo de
la tierra.
• Un antiguo comentario judío
llamado Midrash Tehillim aplica
este versículo a Adán, quien fue
nacido de la tierra.
• El espacio cósmico hace que el
La vida salmista tome conciencia de la
muerte y cuando se encuentra
con el lugar prenatal, es que ha
dado con el punto de partida de la
vida.
Si dijere: Ciertamente las tinieblas
Versículo me encubrirán;
Aun la noche resplandecerá
11 alrededor de mí.
• En la Escritura se pueden
encontrar frases como: la cumbre
más alta, el horizonte más lejano,
el abismo más hondo, etc.
La muerte • Lo grande contrasta con lo
pequeño, lo infinito con lo finito,
lo cual recuerda al hombre su
mortalidad.
Versículo ¿A dónde me iré de tu Espíritu?
¿Y a dónde huiré de tu presencia?
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• Huye más allá de los mares, luego
desciende hasta la más profundo,
hasta las tinieblas del vientre del
Ejemplo pez.
• Devuelto a la vida, es capaz de
de Jonás comunicarse con Dios pero sin
comprender su voluntad.
• Su “punto de creación” es un
gusano y las hojas de un árbol.
• Dios actúa sobre lo que todavía
no ha nacido.
• Dios conoce a los hombres desde
Conclusión Adán hasta el tiempo de la
resurrección de los muertos.
• El salmo puede interpretarse de
distintas formas.
“Los hombres van al
extranjero a admirar las
alturas de las montañas, las
poderosas olas del mar, las
grandes mareas de los ríos,
la brújula del océano y los
circuitos de las estrellas, sin
embargo, pasan por alto el
misterio de sí mismos sin
pensarlo.”

-San Agustín de Hipona.

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