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cristal.
El señor Wonka va demasiado lejos
Como dentro del hotel espacial no se flotaba, una vez que Charlie y sus
acompañantes lograron bajar del ascensor e instalarse en el hotel,
observaron a su alrededor, todo era de los mejores lujos que existían.
De pronto una voz que provenía de un micrófono comenzó a
cuestionarlos: ¿Quiénes son ustedes? ¿De dónde vienen? Willy Wonka
ordeno que no contestaran nada. Por última vez esa voz chillo de
nuevo con un tono amenazador advirtiéndoles lo que les pasaría si no
contestaban. Wonka se digno a hablar de una forma tan rara, todos
estaban impresionados porque empezaron a hacer ideas que ellos
eran de otro planeta. Como el señor presidente no quería problemas
ni declarar la guerra a los supuestos inquilinos de Marte ordeno que
los recibieran muy bien y que los hospedaran.
Invitación a la Casa Blanca
Era muy extraño, en la tierra todo estaba cerrado y la gente permanecía fija
en una televisión escuchando la noticia de que el señor presidente había
hecho una invitación a gente de Marte, todos estaban asustados y la abuela
Georgina grito por lo que estaban viendo. Aparte el señor presidente se
quedo pensando que en cualquier momento llegarían y no sabían que les
darían de comer. De pronto, las cámaras el hotel que se permanecía en la
parte d afuera perdieron la señal y recibió unos golpes; eran los Knidos
Vermiciosos, el ex comandante de las fuerzas armadas grito:- se los dije
hubiéramos atacado aquellos marcianos locos.
Capsula conmutadora en apuros.
Primer ataque
El gran ascensor de estaba orbitando alrededor de
la tierra, Willy Wonka y Charlie observaron que la
capsula del hotel tenía problemas porque estaba
siendo atacado por los Knidos vermiciosos y
decidieron ayudar. BOOM!!!! Se escuchaban
sonidos muy fuertes por los ataques que recibían
esos marcianos locos. Lo mejor era que se fueran a
la tierra.
De vuelta a la Fabrica de Chocolate