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LA IGLESIA Y LA

ESCLAVITUD
MODERNA

Anaclet BERWA
Adonis ODNE
Este tema está desarrollado en seis puntos:
1) La Iglesia en la institución esclavista en el
Nuevo Mundo
2) Los testimonios de los misioneros
3) Códigos, leyes y reglamentos
4) La Iglesia y la lucha de los esclavos negros
por la emancipación.
5) La visión del negro en la Iglesia
6) Iglesia y derechos humanos
Iglesia y esclavitud moderna es el tercero
capítulo o articulo de la tercera parte de
libro resistencia y esperanza. El autor de
este articulo empieza haciendo una
afirmación: “el balance de las relaciones
entre la Iglesia y la esclavitud en el nuevo
mundo es sensiblemente desastroso: en
general el clero es propietario de esclavos,
cumpliendo para con la administración un
papel legitimador”.
Que quiere decir que la Iglesia es la
predicadora de la desigualdad. San Pablo ha
jugado un papel importante en la Iglesia
primitiva, sin embargo para él, “no hay ni
judío ni griego, ni patrón ni esclavo…”. Pero la
realidad nos muestra que la Iglesia
constituye un elemento estructural en el
dispositivo jurídico e ideológico de la
esclavitud en el Nuevo Mudo.
La Iglesia en la institución esclavista en el Nuevo
Mundo
Al descubrimiento del nuevo Mundo, la esclavitud era una
cosa normal en Europa, y fue en este mismo sentido que el
Papa Nicolás, a través de una bula papal dio derecho al rey
Alfonso de esclavizar el pueblo infiel. El pueblo indígena
considerado como caníbales rebeldes a la evangelización
fue reducido pues a los esclavos por los primeros
conquistadores. La reina Isabel al principio estaba de
acuerdo a la esclavitud de los que resistieron a la
evangelización, pero Bartolomé de Las Casas aboga a favor
de la libertad de los indios, insistiendo que ellos no son
barbaros ni infieles ni enemigos de la cristiandad y que por
eso ellos también merece la libertad como los demás
pueblos.
Pero “los gritos de las Casas resuenan en
el desierto; los indios, no pudiendo
sobrevivir a los trabajos forzados en las
minas de oro de la Española, perecen en
masa.” Frente a una situación que los
indios no resisten a los trabajos forzado,
los europeos empiezan el trafico de los
negros en 1503.
La esclavitud es un modo de producción dominante
durante el siglo XVI, legalizado y justificando por la
Iglesia. Lo que los Obispos critican es la adquisición
de esclavos por medios ilícitos, como las guerras
injustas. Por la Iglesia la esclavitud tiene como
objetivo de convertir los infieles, que son los negros
africanos. Así, pues la esclavitud sirve para salvar las
almas. “La práctica eslavista adquiere de este modo
un estatuto de normalidad, de suerte que en las islas
Canarias, Obispos, canonistas, canónigos, clérigos y
religiosos poseen ellos mismos el 21% de los
esclavos”.
Después de Luis XIII, el Papa Nicolás V autoriza el
trafico y la esclavitud utilizando el argumento de
convertir los africano llevándoles a una verdadera
religión dejando la idolatría, eso era objetivo de la
esclavitud. “durante tres siglos es argumento será
retomado en casi todas las ordenanzas reales y en los
reglamentos de disciplina. Desde el punto de vista del
papado al igual que de las autoridades reales, la Iglesia
no viene como un agregado a implantarse en la sociedad
esclavista, para humanizarla o simplemente ponerse al
servicio de los amos o de los esclavos; él debe orientar el
conjunto de las actividades al servicio de la estructura
colonial esclavista, esto es, en función de los intereses de
los señores, de la administración real.” P.505
Después de Portugal y Holanda, Francia se lanza al
tráfico de los negros, fundando en 1664 la famosa
Compañía de las indias occidentales, a la cual
confía la tarea de introducir eclesiásticos en las
Islas. “Para que ahí predican el santo Evangelio e
instruyeran a esos pueblos acerca de la creencia de
la religión católica, apostólica y romana, como
también edificar iglesias, y ahí establecer curas y
padres para hacer el servicio divino.” Gracias a esta
compañía los eslavos va recibir el bautismo de
manera general así, “los portugueses, bajo el
impulso de su rey, jamás asumían el riesgo de
introducir en Brasil esclavos no bautizados.
Era admitido, en efecto, que la deportación de los africanos
apuntaba en esencia a lograr su evangelización.” Por esta
manera de trabajar se nota que en el siglo XVII había
muchos misioneros en las colonias españolas, portuguesas y
francesas. Ellos estaban dedicados a la evangelización de los
negros pero a la subordinación del rey. Este último se
encargaba de reclutar los sacerdotes y su subsistencia.
Después, los misioneros son pagados con los esclavos y
disponen de sus propias habitaciones. A medida que
construyen parroquias, consolidan el sistema esclavista, así,
mas de las autoridades, son ellos también los pilares del
sistema. La Iglesia a través de sus predicaciones y otras
instrucciones, aprendía a los negros esclavos a reconocer su
estado social.
Los testimonios de los misioneros
Según Dutertre no había diferencia entre la vida religiosa
y la vida social en las colonias. Los capuchinos,
carmelitas, dominicos, jesuitas, jacobitas, son ellos que
acompañaban los colonos, ellos pues enseñaban que los
esclavos son iguales a sus patrones, pero nuestro autor
nos afirma que eso queda al nivel espiritual solamente.
En siglo XVIII la cosa cambia, la Iglesia comienza a
perder su autonomía frente al poder real. Pero es
importante de subrayar que asunto de tener esclavo era
un obstáculo para la Iglesia para evangelizar. Durante el
siglo XVII nadie levantó la voz contra la esclavitud que el
negro estaba viviendo, ni si quiera la Iglesia, nos afirma
nuestro autor.
El padre Dutertre se presenta compasivo frente a la
miseria que el negro africano está viviendo “el
esclavo trabaja desde la mañana a la tarde, y aun de
noche. Esta mal vestido, mal alojado, y hasta
después de su muestre la miseria lo persigue” en las
palabra dolorosa el padre siguen diciendo que “de
cincuenta que mueren, no hay siquiera dos que sean
sepultados con sábana: son llevados cubiertos de sus
andrajos” la misión del misionero siendo la
consolación del pobre, los de este tiempo no ha sido
el mismo, sino que ellos se preocupaban de juntar
las riquezas y explotar el negro eslavo e indio al
máximo.
En cierto sentido la iglesia ve más allá que los
colonos, y comprende que su tarea de
evangelización tiene que encuadrar también
la dimensión social como política para
corregir los errores y excesos de los patronos
en sus relaciones con los esclavos. Es en esa
perspectiva que el misionero se cuida de
hacer rezar a los esclavos todas las tardes bajo
la dirección del capataz, organiza sesiones de
catecismo los domingos, como medio de
propia salvación.
Los amos siempre verán con malos ojos la
instrucción religiosa de los esclavos. Pero para el
padre Dutertre, los esclavos cumplirán mejor sus
responsabilidades si llegan a una verdadera
conversión, al cristianismo. Igualmente, cuanto
más se favorezca el matrimonio de los esclavos,
tanto más se crearan posibilidades de reproducción
de la esclavitud, así Dutertre dice “nuestros francés
cuidan que ellos se casen lo más pronto posible
para tener hijos que, en la secuencia del tiempo,
toman el lugar de su padre, hacen el mismo trabajo
y le prestan la misma asistencia.” 508
A propósitos de los palenques o quilombos, el padre
Dutertre revela con bastante precisión su concepto de
la esclavitud. Descarta, en efecto, el deseo de libertad
como la causa principal del palenque, para lo que
invoca la extrema miseria de los negros en África: “ellos
se juzga más fáciles de ser esclavos entre nosotros,
cuando son alimentados de manera pasable y son
tratados con mas dulzura que libres en sus países,
donde ellos mueren de hambre.” La diferencia entre
negro y blanco en siglo XVII, encuentra la significación
en la Biblia partiendo de Caín hermano de Abel, pero
para justificar la servidumbre del negro al hombre
blanco.
A demás de Dutertre, hay Padre Alonso de la
compañía de Jesús, quien escribe también
sobre la misión de evangelizar a los negros.
Así, él escribe para dar coraje a sus
compañeros en la tarea, y hasta que llega a
discutir con los teólogos y canónigos sobre el
trafico de los negros. Padre Alonso
encuentra que los Misioneros tienen que
preocuparse de la evangelización de los
negros por la misma razón que de los indios.
Los blancos se sirven de la teología de san Pablo para
garantizar al amo. Como sacerdote dominico, Labat, al
final del siglo XVII, muestra un celo poco común en las
islas francesas del Caribe por la catequesis de los esclavos y
por su iniciación a las practicas de la confesión. Pretende
conducir una obra de beneficencia y de humanidad, pero
reconoce que su empeño es el de un propietario de
esclavos que ve la conversión al cristianismo como un
medio seguro de hacer que ellos interioricen su condición,
y de este modo contenerlos en su propensión a la revuelta.
Así, Labat nos cuenta los métodos utilizado por los
señores para sujetar a sus eslavos a la sumisión total.
Instrucción religiosa del esclavo pues, es dado de
antemano como un elemento esencial.
Códigos, leyes y reglamentos
Para tratar este tema nuestro autor utiliza los
artículos del código negro francés. Casi en todo
América Latina donde se practica la esclavitud se
atribuye un papel importante a la religión por
medio de leyes promulgadas por la administración.
En las colonias que sea españolas, portuguesas y
francesas en la Iglesia, es un lugar donde el esclavo
reciba la formación para someterse a su patrón,
“Los poder reales no operan sin el conceso de la
Santa Sede, ni de los superiores religiosos y de los
teólogos metropolitanos” 509
el código negro se abre con objetivo expreso del poder
real de usar su autoridad para mantener la
disciplina de la Iglesia católica apostólica y romana.
Como lo hemos visto, en siglo XVI, la Iglesia
formaba parte integrante del dispositivo
conquistadora colonial del Mundo Nuevo. Así, ellos
llevan la evangelización eslavista a los negros y de
cazar los protestantes y judíos porque son enemigos
del cristiano como aparece en el artículo I del
código negro. Con este código pues, la Iglesia y el
Estado se pusieron juntos y el esclavo negro se
quedo en medio como negocio de valor.
La Iglesia y la lucha de los esclavos negros por la
emancipación.
Después de promulgar el código negro, el numero de los
esclavos no hizo que aumentar. Los jesuitas conocidos como
curas de los negros, queriendo evangelizar los negros en sus
idiomas, fueron expulsados. Y así, con el acuerdo con la santa
sede, se abrió el seminario en Francia para formar sacerdotes de
las colonias, para seguir la misión esclavista. El perfecto de la
misión de los capuchinos en las islas del Viento, padre Charles-
Francois de Contances, no solo sitúa en el mismo plano el
interés publico, el interés de los señores, la salvación de las
almas como motivo principal de la instrucción catequética de
los esclavos, sino que también propone la Iglesia como lugar de
disciplina penitencial para los esclavos fugitivos.
En concreto, los domingos y los días de fiesta, de tres a seis
mes, el esclavo denunciado por su amo era colocado de
rodillas en el quicio del portal de la iglesia, el día de la
Pascua, el cura pronunciaba la siguiente formulario:
“servidor infiel y malo, porque faltaste al servicio de vuestro
señor… para exponeros a la perdida de vuestro salvación y
de vuestra vida, nosotros os condenamos por la autoridad
de nuestro ministerio a hacer penitencia…” y sobre los
negros envenenadores “…criminal infame, odioso a Dios,
indigno de ser contado entre los hombres, más cruel que las
bestias feroces… la atrocidad de vuestro crimen merece la
muerte y todos los tormentos…” esta inmoralidad nos
muestran la formación que recibían los sacerdotes y la
relación que la Iglesia tenia con la autoridad civil.
Además, teniendo miedo de que los esclavos
pudieran revolucionarse contra ellos, el
gobernador apuntaba de mantenerse en la
ignorancia, en la profunda ignorancia. Pero
más tarde el 22 de Agosto 1791 estuvo una
revolución de los esclavos de Santo Domingo, en
este caso, hubo sacerdotes que manifestaron a
favor de los esclavos y otros querían entrar en la
negociación entre esclavos y señores. Esta
revolución tiene que ver con la revolución
francesa e Inglaterra que llevaron a una
declaración de la igualdad y de la libertad.
Los sacerdotes que se manifiestan a favor de los
esclavos podemos mencionar Padre Gregorio, quien
muy pronto comprende la necesidad de enviar a
Toussaint Louverture doce sacerdotes de la constitución
civil del clero para apoyar la política de emancipación.
Pero Roma condenando la revolución francesa, declara
cismático al clero que se establece en Santo Domingo
con el apoyo de Padre Gregorio. La Iglesia no quiere
escuchar este pensamiento que esta contra la esclavitud.
Será libre de la esclavitud en 1804 cuando recibe el
nombre de Haití y santo Domingo queda aislado para
evitar el contagio de las ideas aboliciones en otras
colonias.
La visión del negro en la Iglesia
La Iglesia es una muralla que ayudó los esclavos
en su luchas y conseguir su dignidad como ser
humano. pero no podemos olvidar que la
pastoral de los primeros misioneros y
conquistadores, el negro es descendencia de
Caín, así, los africanos heredaron el color negro
que es la maldición sobre ellos. Padre Dutertre
nos muestra que el hombre negro era
considerado como menor, hasta que no pensaba
a su libertad, y es insensible frente a los castigos
y la muerte.
Todo negro es tenido como hechicero, y
manifiesta una tendencia inherente a la
práctica de la hechicería, aun cuando den
todas las señales aparentes de conversión al
catolicismo. El sacerdote jesuita Mareau en
san Cristóbal habla de negros como
hechiceros que usas dogas para la
cooperación del demonio que secretamente
como consecuencia de pacto.
hablando de racismo del negro, es importante de subrayar
la subordinación de la Iglesia al Estado, así, el negro
considerado como bárbaro es víctima de esta relación, en el
sentido que había que convertirlo al catolicismo. Es Las
Casas que abre este debate un poco tarde en el S. XVI
tratando el derecho natural. Continúan prevaleciendo en la
Iglesia las tesis de San Agustín, Santo Tomas y Suarez sobre
la esclavitud como correspondiente no a la naturaleza
primaria del esclavo, no debe su suerte a la maldición de
Caín, la debe al pecado, o, en todo caso, a una naturaleza
embrutecida; en pocas palabras, a un estado de barbarie del
que el poder civil puede liberar de manera progresiva. No
obstante, todavía es necesario someterse a ella como a una
providencia, del modo que San ¨Pablo lo propone.
Al término de la revolución francesa, hay
historiadores como Henri que pretenden a
negar el papel de la Iglesia para suavizar el
esclavitud buscando la igualdad. Y por tanto,
Pio V, Urbano VIII y Benedicto XIV para ellos
los negros como indios, son seres humanos
como los demás. Así, para ellos, hay que
erradicar esas guerras productoras de
cautivos que pueden legitimar la esclavitud.
Iglesia y derechos humanos
El clero colonial tenía una teología de “esclavitud-
remedio, la esclavitud-penitencia o disciplina para
conducir al esclavo a la condición de ser humano” el
esclavo toma la Iglesia como único lugar donde puede
pasar para encontrar sus derechos. Y los otros esclavos
optan convertirse al protestantismo sobre todo los de
Estados Unidos. Pero más tarde los señores se
opusieron a la conversión de los esclavos. Porque los
protestantes podrían tener y leer la Biblia fácilmente y
asi pueden entender criticar la vida que viven como
esclavos. Y por tanto que sea el patrón como esclavo,
interpreta la biblia en su favor.
Nuestro autor termina haciendo una
invitación diciendo: “ojala la teología de la
liberación haga posible hoy la vuelta al
cuestionamiento sobre el derecho al
reconocimiento de la dignidad humana
inviolable en cada ser humano” eso es la
misión de cada uno para ayudar la Iglesia
donde ella no llega a establecer una justa
conexión entre los poderes políticos y la
cultura europea.
Conclusión
Antes de terminar nuestro trabajo es importante de
recordar que estábamos dando síntesis del articulo
“Iglesia y la esclavitud moderna” de Laennec
Hurbon que aparece en la colección de los artículos
“resistencia y esperanza, historia del pueblo
cristiano de América Latina.” Después de hacer este
camino de reflexión podemos retener que aunque la
Iglesia contribuyó en la conquista y esclavitud, ella
ha ayudado también para que el pueblo indígena y
pueblo negro esclavo encuentren su dignidad como
ser humano. Este artículo ilumina también la
relación que la Iglesia tenia con el poder real.

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