platicar, parlar). Una charla, en este sentido, es una conversación entre dos o más personas. Por ejemplo: “Anoche tuve una extensa charla con Martín donde nos pusimos de acuerdo sobre distintos aspectos de la crianza de Tommy”, “Niños, dejen la charla para el recreo: ahora están en clase y tienen que prestar atención”, “Menos de una hora de charla fue suficiente para que el jugador solucionara sus inconvenientes con el presidente del club”. Queda en evidencia que una charla puede ser un diálogo informal o una disertación de una persona. En el primer caso, la comunicación implica un intercambio constante en los roles de emisor y receptor de la información, ya que el mensaje se construye a partir de la intervención de los participantes. El turno de habla no está fijado de antemano sino que surge de la propia dinámica de la charla. La charla puede estar dedicada a los temas más diversos. Dos desconocidos pueden iniciar una charla sobre fútbol en la sala de espera de un odontólogo, tres amigos pueden pasar toda la noche charlando sobre sus vacaciones o una pareja de novios puede charlar sobre el futuro casamiento. Con el desarrollo de Internet, una charla también puede mantenerse a través de la computadora y sin necesidad de hablar. Se conoce como chat al intercambio en tiempo real de mensajes escritos.