 El cuidado de la vida

Todo ser vivo esta necesariamente implicado en el cuidado de la vida consciente

o inconscientemente y no podemos salirnos de la vida para poder llegar a
comprenderla o estudiarla, sino que somos parte consustancial a ella.
Se asume la enfermería como una interacción social y por tanto como un acto
comunicativo, cultural y antropológicamente mediado.

Todo acto de pensamiento de los seres humanos tiene un referente práctico y de igual
manera toda práctica, por muy empírica que parezca, por muy mítica y alejada de la
reflexión teórica es también un aproximación mediada por los conceptos.

“No existe ninguna teoría sin práctica, ni ninguna práctica sin

teoría”
Existe una dialéctica descendente de los conceptos y una dialectica ascendente de la
experiencia, que serían equiparables a lo que llamamos la teoría y la práctica. Ambas
son distinguibles una de la otra, pero inseparables, si se quiere son mutuamente
constituyentes. H. G. Gadamer.
 Dialéctica Descendente y Ascendente

ENFERMERÍA

DESCENDENTE ASCENDENTE

CONCEPTOS
Teoría de PRÁCTICA
Gadamer

PRÁCTICA
TEORÍA • Costumbres
• Conocimiento • Creencia
• Disciplina • Valores
• Afectos
Formas de Reflexión de Enfermería

1. Reflexión epistemológica

2. Conocimiento científico integrado a un orden universal.

3. Identidad clara y diferenciada.

4. Transformación de la sociedad en que se inscribe.

Enfermería critica es una práctica profesional capaz de, en su propio acontecer, anhelarse,
criticarse y superarse; es saberse absolutamente definida en la historia y por lo tanto puede
transformarse en ella. Saber cuales son sus alcances y sus limitaciones, cuales son los límites
de su naturaleza y de su legitimidad.
“Entre sus muchas virtudes Chuang Tzu tenía la de ser diestro en el dibujo. Un día el Rey le
pidió que le dibujara un cangrejo y Chuang Tzu le respondió que necesitaba cinco años y una
casa con doce servidores. Generosamente el Rey le concedió esa petición. Pasados los cinco
años Chuang Tzu llego frente al Rey y le pidió otros cinco años y la misma casa con doce
servidores. Transcurridos los nuevos cinco años Chuang Tzu se presentó ante el Rey y en un
solo instante con un solo gesto y un solo trazo, dibujo el cangrejo más perfecto que jamás
había visto”

Gabriel García Márquez al hacer reverencia a este hermoso cuento concluía con inusitado
énfasis: “Señoras y señores latinoamericanos todos, nos ha llegado la hora de dibujar el
cangrejo”