Gran parte de la historia de la función consular está
relacionada con el desarrollo del comercio internacional y los intereses económicos de los Estados.
Si bien los orígenes de la institución consular se
remontan a la antigua Grecia, la figura del cónsul surgió por primera vez en el siglo XII y evolucionó hasta convertirse en la estructura más compleja que conocemos actualmente. Así como las crecientes tendencias mundiales que influían en la vida cotidiana plantearon un nuevo desafío a la institución consular: la protección de los ciudadanos y la salvaguardia de sus intereses. Acontecimientos importantes en la historia de la negociación En 1949, la Comisión de Derecho Internacional de las Naciones Unidas examinó la posibilidad de incluir las relaciones e inmunidades consulares en su futura labor de codificación.
En su séptimo período de sesiones, celebrado en
Ginebra (Suiza), del 2 al 8 de julio de 1955, la Comisión nombró Relator Especial al Sr. Jaroslav Zourek para que comenzara a examinar la cuestión y elaborara un conjunto de disposiciones provisionales, basadas en el jus cogens y el derecho nacional e internacional. El tema no comenzó a examinarse formalmente hasta 1958. El proyecto de artículos se dividió posteriormente en cuatro capítulos: • Relaciones e inmunidades consulares • Privilegios e inmunidades consulares • Condición jurídica de los cónsules honorarios y sus privilegios e inmunidades y • Disposiciones generales En su 12º período de sesiones, celebrado del 25 de abril al 1º de julio de 1960, la Comisión decidió que los artículos relativos a los cónsules de carrera también serían aplicables a los cónsules honorarios. En vista de ello, la Comisión incluyó disposiciones más amplias y agregó algunos artículos nuevos.
Con miras a aprobar una convención sobre el tema, se recomendó
que se celebrara una conferencia internacional y se celebró en Viena (Austria), del 4 de marzo al 22 de abril de 1963. Asistieron delegados de 95 Estados.
Después de examinar detalladamente el texto de la Comisión de
Derecho Internacional, se preparó la versión definitiva para su presentación al pleno. El 24 de abril de 1963, la Conferencia aprobó y abrió a la firma: • La Convención de Viena sobre Relaciones Consulares, • El Protocolo Facultativo sobre la Adquisición de Nacionalidad y • El Protocolo Facultativo sobre la Jurisdicción Obligatoria para la Solución de Controversias. La Convención y ambos Protocolos Facultativos entraron en vigor el 19 de marzo de 1967. Principales disposiciones Artículo 5. FUNCIONES CONSULARES, consistirán en:
a) Proteger en el Estado receptor los intereses del Estado que envía
y de sus nacionales, sean personas naturales o jurídicas, dentro de los límites permitidos por el derecho internacional; b) fomentar el desarrollo de las relaciones comerciales, económicas, culturales y científicas entre el Estado que envía y el Estado receptor, y promover además las relaciones amistosas entre los mismos, de conformidad con las disposiciones de la presente Convención; c) Informarse por todos los medios lícitos de las condiciones y de la evolución de la vida comercial, económica, cultural y científica del Estado receptor, informar al respecto al gobierno del Estado que envía y proporcionar datos a las personas interesadas; d) Extender pasaportes y documentos de viaje a los nacionales del Estado que envía, y visados o documentos adecuados a las personas que deseen viajar a dicho Estado; e) Prestar ayuda y asistencia a los nacionales del Estado que envía, sean personas naturales o jurídicas. Artículo 9 CATEGORIAS DE JEFES DE OFICINA CONSULAR Los jefes de oficina consular serán de cuatro categorías: cónsules generales; cónsules; vicecónsules; agentes consulares. Artículo 10 NOMBRAMIENTO Y ADMISION DE LOS JEFES DE OFICINA CONSULAR
1. Los jefes de oficina consular serán nombrados por el
Estado que envía y serán admitidos al ejercicio de sus funciones por el Estado receptor.
2. Sin perjuicio de las disposiciones de la presente
Convención, los procedimientos de nombramiento y admisión del jefe de oficina consular serán determinados por las leyes, reglamentos y usos del Estado que envía y del Estado receptor, respectivamente. Artículo 12 EXEQUATUR
1. El jefe de oficina consular será admitido al ejercicio de
sus funciones por una autorización del Estado receptor llamada exequátur, cualquiera que sea la forma de esa autorización. 2. El Estado que se niegue a otorgar el exequátur no estará obligado a comunicar al Estado que envía los motivos de esa negativa. 3. Sin perjuicio de lo dispuesto en los artículos 13 y 15, el jefe de oficina consular no podrá iniciar sus funciones antes de haber recibido el exequátur. Artículo 22 NACIONALIDAD DE LOS FUNCIONARIOS CONSULARES
1. Los funcionarios consulares habrán de tener, en
principio, la nacionalidad del Estado que envía. 2. No podrá nombrarse funcionarios consulares a personas que tengan la nacionalidad del Estado receptor, excepto con el consentimiento expreso de ese Estado, que podrá retirarlo en cualquier momento. 3. El Estado receptor podrá reservarse el mismo derecho respecto de los nacionales de un tercer Estado que no sean al mismo tiempo nacionales del Estado que envía. Artículo 25 TERMINACION DE LAS FUNCIONES DE UN MIEMBRO DE LA OFICINA CONSULAR
1. Las funciones de un miembro de la oficina consular
terminarán inter alia: 2. Por la notificación del Estado que envía al Estado receptor de que se ha puesto término a esas funciones; 3. Por la revocación del exequátur; 4. Por la notificación del Estado receptor al Estado que envía de que ha cesado de considerar a la persona de que se trate como miembro del personal consular. Artículo 40 PROTECCION DE LOS FUNCIONARIOS CONSULARES
El Estado receptor deberá tratar a los funcionarios
consulares con la debida deferencia y adoptará todas las medidas adecuadas para evitar cualquier atentado contra su persona, su libertad o su dignidad. • Artículo 66 EXENCION FISCAL Los funcionarios consulares honorarios estarán exentos de todos los impuestos y gravámenes sobre las retribuciones y los emolumentos que perciban del Estado que envía como consecuencia del ejercicio de funciones consulares. Artículo 73 RELACION ENTRE LA PRESENTE CONVENCION Y OTROS ACUERDOS INTERNACIONALES
1. Las disposiciones de la presente Convención no
afectarán a otros acuerdos internacionales en vigor entre los Estados que sean parte en los mismos. 2. Ninguna de las disposiciones de la presente Convención impedirá que los Estados concierten acuerdos internacionales que confirmen, completen, extiendan o amplíen las disposiciones de aquella. Aprobación en la República de Guatemala El Congreso de la República de Guatemala a través del Decreto No. 75-72 aprueba la adhesión del Estado de Guatemala a la CVRC. Dicho decreto, en su primer considerando, expresa que el Gobierno de la República de Guatemala asistió en calidad de espectador a la conferencia respectiva y posteriormente ha estimó conveniente adherirse a la misma en virtud que el texto de dicha convención no contraviene los principios constitucionales ni afecta disposiciones legales vigentes. El Acuerdo Gubernativo No. 20 de fecha 02 de enero de 1973, suscrito por Carlos Arana Osorio, es el instrumento de ratificación de dicha convención. A nivel internacional, consta que la República de Guatemala se adhiere a la misma el día 09 de febrero de 1973.