como una persona que ha decidido convertirse en seguidor de algo o alguien. En el ámbito cristiano, un discípulo es una persona que ha decidido seguir a Cristo. Disciplina
La Biblia es bien clara en cuanto al rol
de la familia en el discipulado. Una de las tareas de los padres de familia es enseñar disciplina a sus hijos. La Palabra “disciplina” proviene del latín, de la misma raíz que “discípulo”. Disciplinar es discipular
•Podríamos decir que impartir
“disciplina” en el hogar tiene ciertas implicaciones similares a formar hijos que sean seguidores, “discípulos”, de las enseñanzas de sus padres.
•De igual manera, los padres deben
ser discípulos del Maestro para que la familia sea verdaderamente un centro de formación de discípulos •Hacer de nuestros hijos buenos “discípulos no es tarea fácil. •Presentaremos 6 herramientas para facilitar el trabajo de discipulado en nuestros hijos. 1. Los padres han de ser modelos para sus hijos
Esta es una ineludible realidad.
“Los hijos imitan a sus padres; por lo tanto, debiera tenerse gran cuidado de presentarles modelos correctos. Los padres que son bondadosos y corteses en el hogar, al paso que son firmes y decididos, verán que se manifiestan los mismos rasgos en sus hijos. Si son correctos, honrados y honorables, lo más probable es que los hijos les imiten eso. Si reverencian y rinden culto a Dios, sus hijos educados de la misma forma, no se olvidarán de Dios”
Conducción del niño, p. 200
1. Los padres han de ser modelos para sus hijos
“Todo hogar cristiano debe tener
reglas; y los padres deben en sus palabras y en su comportamiento mutuo, dar a los niños un precioso ejemplo vivo de lo que desean que lleguen a ser”
El Hogar Cristiano, p. 274
2. Los padres, en primer lugar y luego los hijos, deben tener a Jesús como su modelo
El apóstol Pablo escribió:
“Sed imitadores míos, así como yo lo soy de Cristo” 1 Corintios 11:1 “Sed, pues, imitadores de Dios como hijos amados. Y andad en amor, como tambièn Cristo nos amó, y se entregó a sí mismo por nosotros, ofrenda y sacrificio a Dios en olor fragante” Efesios 5:1, 2 2. Los padres, en primer lugar y luego los hijos, deben tener a Jesús como su modelo
Los padres que deseen ser buenos
modelos para sus hijos han de buscar en Dios, en Cristo y en el Espíritu Santo el modelo a imitar. “Debieran hacer que sea evidente que los rige el Espíritu Santo, al presentar a sus hijos el carácter de Jesucristo”
Conducción del niño, p. 200
3. Discipular en familia implica darle a Dios el primer lugar en todo
“Buscad primeramente el reino de
Dios y su justicia, y todas estas cosas os serán añadidas” Mateo 6:33
Las familias tienen muchas
necesidades que deben ser satisfechas a diario. Otras necesidades son de carácter intelectual o social. Pero Jesúa dice que todo aquello que nos parece “necesario” es secundario en comparación con buscar a Dios y su justicia. 3. Discipular en familia implica darle a Dios el primer lugar en todo
La oración, el estudio de la Biblia y
los cantos no deben faltar en los hogares que desean formar discípulos para Cristo. Esta práctica en el culto familiar llenará la vida de padres, madres e hijos del mensaje del evangelio que se exteriorizará en el diario vivir. 4. Discipular en familia conlleva a seguir las enseñanzas de Jesús
La Biblia será el libro de texto y Jesús
el maestro principal. “Dijo entonces Jesús a los judíos que habían creído en él: “Si vosotros permanecéis en mi palabra, seréis verdaderamente mis disípulos; y conoceréis la verdad, y la verdad os hará libres”
Juan 8:31, 32 4. Discipular en familia conlleva a seguir las enseñanzas de Jesús
Los atributos de Jesús deben
reflejarse en el hogar, según el libro La Educación son: Amor Gratitud Confianza Ternura Justicia Tolerancia 4. Discipular en familia conlleva a seguir las enseñanzas de Jesús
Los hijos que aprenden “a confiar,
obedecer y reverenciar a su Dios. Aquel que imparte al niño o al alumno semejante don, lo dota de un tesoro más precioso que la riqueza de todos los siglos: Un tesoro tan duradero como la eternidad” La Educación, cap. 27, p. 219 5. Para discipular en familia, los padres deben presentar el evangelio de forma atractiva
Aún cuando tenemos dificultades,
pruebas y tentaciones. El enemigo de las almas se mantiene siempre buscando nuevas formas de desanimar a los seguidores de Jesùs. Para contrarrestar esto, los padres pueden compartir en el hogar todas las alegrías y bendiciones que recibimos por ser seguidores de Cristo y miembros de su iglesia. 5. Para discipular en familia, los padres deben presentar el evangelio de forma atractiva
Los hijos deben ver en sus padres
pruebas fehacientes de que vale la pena seguir a Jesús. Las oraciones contestadas, los milagros obrados en sus vidas, las historias de maravillosas conversiones son entre otras, historias que nuestros hijos deben conocer.
Es triste ver que con frecuencia lo
que se comenta en casa es lo negativo que ocurre en la iglesia. Evitemos esta conducta errada, presentemos un evangelio atractivo. 6. Discipular en familia incluye compartir nuestra fe con los demás
Al despedirse de sus discípulos, Jesús
les ordenó formar más discípulos. Cada miembro de nuestra familia debe asumir la tarea de ser portadores de la luz del evangelio. 6. Discipular en familia incluye compartir nuestra fe con los demás
“El hogar debería ser una escuela
preparatoria donde los niños y los jóvenes se capaciten para el servicio del Maestro” Conducción del niño, p. 18 6. Discipular en familia incluye compartir nuestra fe con los demás Algunas ideas para implementar esta recomendaciön son: • Mencione en el hogar las oportunidades que ha aprovechado para testificar de Cristo a otros. • Haga una lista de sus amigos y vecinos que aún no conocen el evangelio. • Comenten en familia cómo pueden ayudarles. • Anime a los hijos a realizar actos de bondad y cortesía por ellos. • Ayude a la familia a descubrir los dones y talentos que Dios les ha dado. 6. Discipular en familia incluye compartir nuestra fe con los demás
Algunas ideas para implementar esta
recomendaciön son: • Escoja un proyecto misionero para la familia. • El hogar puede ser sede de un grupo pequeño. A manera de conclusión
“Los niños deben ser educados de
tal manera que simpaticen con los ancianos y afligidos... Debe enseñárseles a ser diligentes en la obra misionera… a fin de que sean colaboradores con Dios.”