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¿Cómo integrar las humanidades en currículos

de carreras no humanistas, de manera que las


humanidades sean una marca académica?

JEFFERSON WILES LINARES


VIERNES 03 DE ABRIL DE 2020
Motivación negativa.

Evitar un resultado negativo de tal forma que


el comportamiento se oriente a la reducción
de las posibilidades de que tal resultado
ocurra.
• Las humanidades no aportan a mi formación disciplinar.
• Las humanidades son una suerte de conocimiento
misceláneo.
• Las humanidades de alguna forma confrontan la lógica de
la producción y el consumo.
• ¿Pueden las humanidades formarme en términos de que
se propicie en mi carácter la solidaridad, por ejemplo?
Motivación positiva

Dirigir la conducta estando motivado a alcanzar la meta y así


buscar los medios pertinentes
• La pasión y la sensibilidad, ¿por qué?
• El entusiasmo y la excitación, ¿por qué?
• Las humanidades como un vector de proyección y de entrega.
• Las humanidades podrían propiciar la interrelación entre el
dominio de sí y el don de sí.
• Las humanidades permiten dar cuenta de la imbricación
entre la libertad personal y la solidaridad social.
• Las humanidades y las necesidades de autorrealización.
Conflicto aproximación-
evitación
Profesores hedónicos: Nadia Boulanger

“No creo en la enseñanza de la estética a menos que se combine


con un intercambio personal”

“No os limitéis a hacerlo lo mejor que podáis. ¡Hacedlo mejor de


lo que podéis!”

“Que tenga yo la posibilidad para intercambiar lo mejor que hay


en mí con lo mejor que hay en vosotros”

“El profesor no es más que el humus del suelo. Cuanto más


enseña uno, más se mantiene en contacto con la vida y sus
resultados positivos. Considerándolo todo, a veces me pregunto
si el profesor no es el verdadero alumno y el beneficiario”
Profesores hedónicos: Jorge Luis Borges

“Creo que el ejercicio de un profesor de literatura es hacer


que sus estudiantes se enamoren de una obra, de una
página o de una línea si quieren, es decir, que algo quede
en su memoria, que algo siga viviendo en su memoria y ese
algo pueda ser citado después con algún error, que es una
secreta corrección” (Borges, 1985)

“Yo creo sentir la poesía y creo no haberla enseñado; no he


enseñado el amor de tal texto, de tal otro: he enseñado a
mis estudiantes a que quieran la literatura, a que vean en la
literatura una forma de felicidad” (Borges, 1980, 38)

“Hay personas que sienten escasamente la poesía;


generalmente se dedican a enseñarla” (Borges, 1980, 38)
Profesores hedónicos: Knute Rockne

 Su verdadera eminencia radica en la


creación de una estirpe de entrenadores
sin igual en ningún otro deporte (ni
empeño pedagógico)
 Profesor de profesores, un Maestro
cuyos discípulos, a su vez, se
diseminarían y perfeccionarían sus
doctrinas
 Consideraba a sus discípulos como una
familia. Mantenía un estrecho contacto
personal con ellos, dándoles consejos
profesionales y personales, enviándoles
regalos de boda, interesándose por sus
esposas e hijos
Profesores
hedónicos
Aquellos que en sus clases disfrutan de su disciplina y contagian el placer por la
misma, haciendo de sus clases “espacios de provocación” (Altamirano Flores, 2013)

Aquellos que lo primero que hacen es despertar la pasión por su disciplina y luego
proceden con el análisis y estudio de la misma: infunden el gusto para encontrar el
placer y de ahí hasta que se tome la forma de un hábito

Recurren a la enseñanza atractiva, la transmisión, el contagio: incitan, orientan


rumbos, contagian entusiasmo

Aquellos que enseñan deleitando para contagiar el amor por lo que hacen. Haciendo
un magisterio contagioso

Hacen que sus discípulos disfruten de su disciplina como quien disfruta de


cualquier otro placer de la vida, como tomar un helado, pasear por un jardín lleno
de flores
El contagio como modelo didáctico de la transmisión.

El contagio como modelo didáctico de la transmisión en el


arte de vivir se encuentra en la escisión entre teoría y
enseñanza, entre la visión crítica de un determinado corpus
teórico disciplinar y su aplicabilidad a la enseñanza. El
contagio, sin desprecio de lo repetitivo y memorístico, se
inserta en lo significativo y actitudinal, esto es, la formación
de hábitos y la promoción del placer por lo que se hace.
¿Acaso en estos dos aspectos, uno práctico y otro afectivo, no
se cifra la adquisición y el desarrollo de cualquier
competencia?
Cuando no se puede tener
la cosa por que hombre muere,
aunque no falta querer,
publica, a más no poder
que no la ha en gana ni quiere.
Como tan altas las veía
y entre zarzas y púas
y alcanzar no las podía,
así como así no os quería,
dijo la zorra a las uvas.

Sebastián de Horozco (1510- 1547)

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