preordenados en orden a la consecución de un fin, tanto el Juez como quienes intervienen en él, deben observar una conducta formal y ajustarse a determinados requisitos, cuya regulación conjunta se conoce como actuación, la cual es de común aplicación a toda clase de procesos. ACTOS DE IMPULSIÓN El impulso procesal es la actividad que tiende a hacer avanzar el proceso mediante cada uno de los movimientos, trámites, periodos y fases que lo componen. Es importante destacar que la impulsión procesal depende primordialmente del Juez, sin embargo, las partes no están relevadas de ella, por lo cual deben colaborar con el funcionario en la actividad procesal. (Ver Art. 8 C.G.P.).
Los actos de impulso no deben ser confundidos
con la iniciación de un proceso. LA IMPULSIÓN OFICIOSA DEL PROCESO POR EL JUEZ Se entiende por principio de impulsión oficiosa del proceso, el que exige que una vez iniciado éste con la demanda, denuncia o querella, debe el Juez o el Secretario, según el acto de que se trate, impulsar su marcha, sin necesidad de que las partes lo insten verbalmente o por escrito para que lo haga, lo anterior con el fin de que no haya estancamiento ni demoras en su trámite. El artículo 42 numeral 1º del C.G.P., es una de las disposiciones que obliga al Juez al impulso procesal.
“Son deberes del Juez: 1. Dirigir el proceso, velar
por su rápida solución, presidir la audiencias, adoptar las medidas conducentes para impedir la paralización y dilación del proceso y procurar la mayor economía procesal.”
Con esto se evita la exagerada prolongación del
proceso y la incertidumbre sobre los derechos o relaciones jurídicas objeto del litigio LA CARGA DE IMPULSIÓN DEL PROCESO POR LAS PARTES
Existen actos de impulsión a cargo de las partes
que consisten en peticiones escritas u orales que deben formular al secretario o al Juez, en el evento que estos últimos no cumplan con su deber.
El incumplimiento por las partes de dicha carga
produce diferentes consecuencias desfavorables dentro del proceso. (Ver art. 317 C.G.P. – Desistimiento tácito) ACTOS DE ASEGURAMIENTO La Ley Procesal contempla medidas especiales para asegurar el éxito del proceso y efectivo cumplimiento de la sentencia una vez ejecutoriada.
Son ejemplos de las medidas de aseguramiento
de bienes:
El registro de la demanda en la oficina de
instrumentos públicos cuando verse sobre bienes inmuebles y derechos reales constituidos en ellos; y el embargo El embargo: consiste en poner el bien mueble o inmueble, fuera del comercio (Ver art.593 C.G.P.).
Secuestro: consiste en entregar el bien a un
secuestre, designado por el Juez, quien debe administrarlo responsablemente como un buen padre de familia. (Ver art. 595 C.G.P.)
Las medidas cautelares que se emplean en
los diferentes procesos tienden a satisfacer el aseguramiento. ACTOS PROBATORIOS Se entiende por actos probatorios procesales aquellos que se ejecutan para la petición, presentación, admisión, decreto y práctica de los medios probatorios que se utilizan en el proceso, con el fin de llevarle al Juez el convencimiento sobre los hechos que debe tener en cuenta para tomar sus decisiones.
Estos actos pueden ser del Juez, las partes,
terceros intervinientes, etc.
(Ver artículos 164 a 182 del C.G.P.)
ACTOS PROCESALES DE ALEGACIÓN
En sentido general se entiende por alegación
el acto procesal por el cual las partes o los terceros intervinientes suministran al Juez datos de hecho o de derecho que interesan al proceso. Son simples declaraciones y pueden ser, los contenidos en la demanda y su contestación, proposición de actos probatorios, los recursos, las solicitudes de nulidad y los alegatos propiamente dichos, entre otros. ACTOS DE DECISIÓN DEL JUEZ Los actos de decisión del Juez están contenidos en la providencias, a través de las cuales dirige, decide el litigio o resuelve las pretensiones presentadas por quienes intervienen en él. Estos se clasifican en dos categorías: Sentencias y Autos.
Sentencias: Este término se reserva exclusivamente para la
decisión definitiva de instancia. Son las que deciden sobre las pretensiones de la demanda o las excepciones de merito, cualquiera que fuere la instancia en que se pronuncien, las que decidan el incidente de liquidación de perjuicios, y las que resuelven los recursos de casación y revisión. (Art. 278 C.G.P.)
Así mismo la Corte Suprema de Justicia ha indicado que la
sentencia es el acto mediante el cual el Juez cumple el deber jurisdiccional que le impone tanto el derecho de acción como el de contradicción. Autos: Son todas las demás providencias (Art. 278 C.G.P). Estos se dividen en: Autos Interlocutorios y de Trámite.
*Los autos interlocutorios son aquellos que
contienen alguna decisión sobre el contenido del asunto litigioso, o que resuelven alguna cuestión procesal que puede afectar los derechos de las partes o la validez del proceso, es decir que no se limitan al mero impulso procesal. Ejemplos: Los autos que resuelven un incidente, los que admiten o rechazan la demanda, los que niegan el decreto o práctica de pruebas, entre otros. Los autos de sustanciación o trámite: son los que se limitan a disponer un trámite de lo que la Ley establece para dar curso progresivo a la actuación, y se refieren específicamente al impulso procesal. Ejemplos: el auto que ordena copias, una orden a secretaría, citaciones etc. FORMALIDADES DE TODA PROVIDENCIA Cualquier providencia judicial está sujeta a la observancia de una serie de formalidades comunes a todas ellas (Art. 279 C.G.P.). Como por ejemplo:
* Cuando debe dictarse por escrito la providencia
se encabezará con la denominación del correspondiente juzgado o corporación que la profiere (Por ejemplo Tribunal Superior del Distrito Judicial de Santa Marta, Sala Primera Civil – Familia). Este requisito se repetirá cada vez que se profiera una decisión, lo cual sirve para separar y diferenciar una providencia de otra. Debe indicarse el lugar y la fecha en que se pronuncie, expresado en letras, no simplemente en números, pues por la importancia que tiene esa formalidad se quiere evitar toda posibilidad de incertidumbre o adulteración de la fecha.
Toda providencia judicial requiere que termine con
las firmas del Juez o los Magistrados, en caso de que así no ocurra, para nada se va a afectar la validez del proceso por cuanto la esencia de las firmas es ser simples formalidades cuya inobservancia no origina causal de nulidad. (Art. 288, 325 inciso 1, 342 inciso 1º del C.G.P.). Dentro de los requisitos comunes a toda providencia judicial, el artículo 279 C.G.P., impone la obligación de motivar de manera breve y precisa todas las decisiones judiciales a excepción de los autos de sustanciación o trámite. Así mismo prohíbe realizar dentro de las providencias transcripciones de actas, decisiones, o conceptos que obren dentro del expediente.
En las providencias, solo caso especial, no se debe
anotar el nombre de los apoderados judiciales. Artículo 303 del C. de P. C., vigente hasta el 1º de enero del 2014. LA SENTENCIA Es el pronunciamiento del Juez sobre las pretensiones y las excepciones que no tengan carácter de previas. El artículo 280 C.G.P. del C.P.C., indica que la sentencia, fuera de las formalidades comunes a toda providencia judicial debe contener:
Una motivación limitada al examen crítico
de las pruebas con explicación razonada de las conclusiones sobre ellas, y a los razonamientos constitucionales, legales, de equidad y doctrinarios… El Juez debe calificar la conducta procesal de las partes…. De lo anterior podemos inferir que el Juez:
Debe hacerse un examen crítico a los fundamentos
legales y jurídicos o las razones de equidad que utilice.
La decisión debe estar plenamente motivada.
La parte resolutiva deberá contener una decisión
expresa y clara sobre cada una de las pretensiones de la demanda, las excepciones cuando proceda resolver sobre ellas, las costas y perjuicios, entre otros.
Nota: Lo que hace motivada una sentencia no es la
extensión de la misma, si no su fundamentación breve, precisa, clara, con lenguaje entendible y no transcribir lo que ya reposa en el expediente. La sentencia ya ejecutoriada produce varios efectos jurídicos, como por ejemplo:
*Sirve de título ejecutivo contra el obligado a
cumplirla.
*Impone a otros funcionarios ciertas obligaciones,
como al registrador de instrumentos públicos la de registrar la sentencia si produce alguna modificación en la situación jurídica de un derecho real constituido.
*Sirve para llevar determinada condición o calidad
ante la sociedad, como sucede con las que versan sobre el estado civil. Por regla general los efectos de la sentencia se surten solamente entre quienes fueron partes en el respectivo proceso y sus causahabientes a titulo universal o singular. Pero algunas sentencias producen efectos erga omnes, es decir, contra todo el mundo. ACLARACIÓN, CORRECCIÓN Y ADICIÓN DE LAS PROVIDENCIAS JUDICIALES
Aclaración: (Ver art. 285 C.G.P).
Esta procede contra toda providencia y si se hace a petición de parte no se requiere emplear recurso alguno, puesto que la aclaración es en sí misma un derecho otorgado a las partes o a los terceros reconocidos en el proceso, de la misma forma se puede pedir aclaración de autos (novedad). En la aclaración no es posible introducir modificaciones a lo decidido. La petición de aclaración debe interponerse dentro del término de la ejecutoria, y como no se trata de un recurso de reposición no requiere traslado alguno; debe el Juez resolver de plano la solicitud, decisión que estará contenida en auto aclaratorio que no admite ningún recurso.
Corrección: (Ver art. 286 C.G.P.).
Tratándose de errores aritméticos puede obtenerse la corrección en cualquier tiempo, es decir que no interesa si la providencia esté o no ejecutoriada. Se puede hacer de oficio por el Juez o a petición de parte, en cuyo caso se decreta por auto. La corrección debe versar sobre un cálculo aritmético mal efectuado, como cuando se dice que se condena al pago de diez mil pesos diarios durante veinte días y se establece como suma total la de cuatrocientos mil pesos, con lo cual salta a la vista un error aritmético; o también en el evento que en la parte resolutiva de la sentencia se deje de transcribir un lindero del inmueble que se ordena restituir; este error por omisión puede ser corregido en la misma forma.
Adición: (Ver art. 287 del C.G.P.).
Puede acontecer que el Juez al tomar su determinación dejó de resolver parte de las solicitudes que estaban para su consideración.