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yawarwan kacharichiy

(liberación sangrienta)

Entre muchos árboles, donde hay muchos animales como ganado y suelos verdes, se puede
apreciar demasiado las incontables corrientes de agua formando canales que sirven para el
trabajo diario de los indígenas. Junto a un cerro rodeado por dos grandes riachuelos de agua
en lo más alto habia un sol “inti “muy hermoso iluminando a todo lugar más sumando las aves
que al cantar solo lo hacían que por el transcurso del día fuera aún mucho mejor para los
“endios” de Quilcate.

En la noche era totalmente diferente este sitio por las historias que se contaba del lugar, los
perros aullaban a la media noche y los cuervos parecían ser animales nocturnos y es que era
antes muy tranquilo si no hubiese sido por los gritos desgarrara dolores que se oía de noche
por parte de indígenas que le hacían pasar sus patrones “kamayuq”.

En una hacienda no tan lejana del pueblo habitaba un patrón con una hacienda llena de cultivo
y ganado, pero tambien está el trato brindado en los que principalmente hacían que se
mantuviera completamente el patrón, específicamente maltrataba a los endios y no les daba
de comer haciendo que algunos mueran por desnutrición hasta incluso habia un cuarto
específicamente para llenarlo de cadáveres de varios de esta misma gente. De este ultimo los
endios comentaban mucho entre ellos, pero lo hacían de una manera deprimente por el hecho
que había personas muertas adentro del cuarto.

- ¿Qué clase de ser se supone que eres?, aunque viéndolo bien creo que eres un perro idiota-
dijo el patrón a un indígena cerca

El indio no podía responder porque ya sabía lo que le iba a pasar si se doblegaba a estar bajo
su control o a cuestionarlo, sin embargo, no se omitía para nada el coraje que guardaba que
incluso haciendo las ordenes que se les mandaba eran azotados sin piedad por parte de los
patrones.

- ¡Runasimi! ¡Runasimi! Mi espalda- Dijo Curí

- Shh…silencio indígena- dijo el patrón tirándole fuertemente un puñete sacándole un diente a


curi.

- bueno pues, jem y quien sigue? Dijo el patrón.

Los indios estaban muertos de miedo porque sabían el final que les iba a llegar a uno por uno si
seguían ahí. Mientras el patrón sé descuidaba e iba a otro lugar los indios aprovechaban un
poco de tiempo para cantar “taky” músicas folclóricas, secretamente unos 4 indios o incluso
menos, pero si tenían la oportunidad lo hacían porque al patrón no le gustaba escuchar en
absoluto estas canciones. Con la voz nada más era sus canticos indígenas, de alegría era
cuando sabían el momento de hacerlo.

-Canto indígena-

Libre kaytam munani

puchuq watakunapi takiyta hinalla ruwanaypaq.


Hamuychis aysaykuy, manan tiempo kanchu samarinaykipaq

Hinaspapas tiempota t’aqanki chayqa, pruebasunkin

Chayqa kallpaq runa hinam, pachanpi, aswanqa pisilla

Hinaspa sichus pruebayta munanki chayqa aswan allinta apamuy tukuy atisqaykita

Mana kunanqa sayayta atiwaqchu, wichq'ay hinaspa cargay

ama kunanqa sayaychu…

Al día siguiente habia un sol radiante por las mañanas, las aves cantaban y lo hacía tener un
poco de alegría, aprovechando que el patrón no estaba una india hombre y mujer se
recostaron en el pasto para cantar. Todo parecía normal, pero sería interrumpida por el patrón
“añaruso” que ordeno a una india de nombre Anyi que viniera. El patrón habia sospechado que
hacían lo que querían mientras el estaba en la ciudad emborrachando. Cuando de repente
llego el patrón a la hacienda ebrio encontró a un par de indios cantando, uno se fue y la que se
quedo era una mujer india el otro se fue rápidamente a seguir con sus labores del lugar.

- Ey tú, si tu muchacha quiero que laves mis pies con tus lagrimas- Dijo el patrón “añaruso” feo

-¿…? Ya voy -Respondió Ayni

-Ahora haz tu trabajo o si no te ira peor estúpida- Dijo el patrón

Ayni no podía asi porque si hacerlo ya que necesitaba llorar, en eso el patrón agarra lo agarra y
un palo con clavos y le da en la espalda para que llorase, los clavos quedaron clavados en la piel
de la indígena sin embargo no le importo eso al patrón. Ayni se pone a llorar y sangrar mucho,
el patrón “añaruso” lo deja tirada sin más en el suelo sangrando.

Los endios que se encontraban en el cultivo escucharon llantos de dolor de una mujer,
entonces se preguntaron que habrá sido eso. Se estaba haciendo tarde, el “añaruso” patrón
arrastro hacia el cuarto de escape donde la dejaría morirse y podrirse ahí.

Ya de noche el patrón un poco cansado por lo que habia sucedido, decide llamar a Curí para
que le sirviera algo que comer porque se moría de hambre el patrón.

- Muy bien perro, almenos no eres tan lento en hacer las cosas como la india esa- Dijo el
patrón.

Despues de obedecer lo que le dijo, curí se retiró como si nada ya que el patrón como estaba
demasiado ebrio se recostó en su cama sin ningún remordimiento por lo que habia hecho
anteriormente.

La noche pasaba mientras que dentro de la hacienda Curí se dirigía en donde se encontraban
los demás endios y le llamo la tención un cuarto que apestaba demasiado, tenia una mancha
roja en la puerta que curiosamente estaba un clavo lleno de sangre. Su curiosidad por saber el
que contenía el cuarto era mucha ya que él no sabía que albergaba.

- ¡imataq kay! ¡imataq kay!, mis ojos ¿que acabo de ver? - Dijo Curí
Habia visto un montón de endios muertos en descomposición extrema lo que le dejo en shock
y no sabía que decir por lo que habia visto, en cuanto se encontró con los demás no podía
hablarles. El cuarto donde se ponía a los cadáveres apestaba mucho a un olor pestilente y
rancio el cual le decían puerta de “pasapasa” escape los indios ya que la muerte y no hacer
nada era la única salvación que tenían.

Fin

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